jueves, 27 de octubre de 2011

Receta del rabo de toro


Se acerca el invierno y con él nos va a tocar dejar los platos fríos y las ensaladas a un lado y empezar a comer platos más calientes (garbanzos, sopas, etc.).

Hoy queremos dejaros la receta para cocinar el rabo de toro (os recordamos que es una de las especialidades de nuestro restaurante).
Sofreír el rabo en trozos en una olla con aceite de oliva. Cuando esté dorado, añadir el pimentón dulce.
Incorporar la cebolla, los dientes de ajo enteros, las zanahorias, el laurel, el vino blanco, la canela, un poco de nuez moscada, los clavos, la pimienta y la pastilla de caldo concentrado desmenuzada. 
Añadir agua hasta que cubra todos los ingredientes y dejar cocer 1 y 1/2 hora aproximadamente.




Esperamos que disfrutéis de esta receta y estaremos encantados de que nos dejéis vuestros comentarios dándonos vuestras opiniones.


jueves, 13 de octubre de 2011

La importancia del aceite de oliva

Cuando vamos al supermercado encontramos muchas variedades de aceite (de girasol, de oliva, etc.), pero ninguno de ellos aporta tantas calorías a nuestra dieta como el aceite de oliva. Aparte de las calorías, nos aporta un sabor especial que no se consigue con los demás aceites, y muchos expertos aseguran que nuestra dieta mediterránea no existiría sin este aceite porque no se podrían cocinar la mayoría de los platos de esta dieta.

El aceite de oliva se puede consumir de distintas maneras. Aquí os dejamos unos ejemplos:

                    - en crudo: Ya que el aceite de oliva virgen extra conserva todo el aroma y sabor, en ensaladas, salsas, etc.  Asimismo, rociado en pan o tostadas o incluso sobre ahumados con aceitunas de mesa, carnes, bocadillos, embutidos, etc.
 
                    - En aliños:  En esto hay que tener en cuenta este importante orden: primero la sal, después el vinagre o el zumo de limón y por último el aceite. El aceite cubre con una capa los ingredientes de la ensalada  evitando que los demás elementos del  aliño penetren en ellos, por eso el aceite es lo último que hay que echar.

                    - En rehogados y guisados: A fuego lento y baja temperatura, la cocción se realiza con el vapor que desprenden las carnes, las verduras y el líquido que se les añade, los sabores se mantienen y los aromas se concentran en la cocción. El aceite de oliva virgen mantiene todas sus propiedades, especialmente con legumbres y verduras.